A siete años del incendio del relleno sanitario Santa Marta, el Tribunal Ambiental emitió un fallo sobre una de las denuncias realizadas por el incumplimiento de las medidas de reparación ambiental, lo cual ha seguido causando daños en la zona.
En específico -recordemos- se trata de los antecedentes de contaminación que los responsabilizan de un incendio que cubrió de una nube tóxica a toda la Región Metropolitana, además de malos olores, contaminación de aguas y otros cargos.
Al respecto, la diputada y patrocinante en esta demanda, Camila Musante, comentó que este «es un fallo histórico, en el que hemos ganado el juicio ejecutivo en contra del consorcio de Santa Marta».
La legisladora recordó en ese sentido el incendio de 2023, que cubrió con una nube tóxica a toda una región y dejó a las comunidades de Talagante, Lonquen, Calera de Tango, San Bernardo, Isla de Maipo, muy afectadas y dañadas.
Así, agregó Musante, “en un fallo histórico del Tribunal Ambiental, nuevamente se le da la razón a la comunidad, de que aquí sí ha existido daño ambiental y que tiene que ser reparado”.
«En esto quiero ser bien majadera, no hay medias tintas en el fallo del Segundo Tribunal, se le ordena al consorcio que repare el daño, que retire los escombros y que realicen los estudios de suelo y de agua que están pendientes», puntualizó la parlamentaria.
En esa línea, la diputada Musante aseguró están dispuestos a llegar “hasta las últimas consecuencias para que esta vez sí se retiren los escombros del incendio del año 2016, se hagan los estudios que correspondan y se cumplan con las normativas ambientales, porque ninguna empresa puede estar por sobre la ley y por sobre la justicia”.
Yorta González, también dirigenta social, dijo que las y los vecinos esperan que este fallo “sí se cumpla, como muchos otros que han sido favorables a los vecinos y Santa Marta no los ha cumplido. Esperamos que este se cumpla y que esta empresa finalmente actúe acorde a la ley”.
Asimismo, González expresó su esperanza de que «hoy día, los líquidos percolados que llegan a nuestros canales de regadío sean finalmente sacados de ahí, se realice un tratamiento de esos líquidos y se nos permita vivir de manera digna, de manera sana, sin contaminación del medio ambiente».
“Los costos del beneficio económico de Santa Marta los pagamos los vecinos y hoy día es necesario que se genere una política de Estado sobre el manejo de los residuos domiciliarios”, concluyó la dirigenta.
Cabe destacar que el relleno sanitario que está ubicado en el predio Rústico Santa Elena de Lonquén, comuna de Talagante, es administrado por el Consorcio Santa Marta, que ya cumplió más de 20 años tratando la basura que actualmente proviene de 16 comunas de la capital. El proyecto cuenta con 296 hectáreas, de las cuales se destinan 87,6 a la gestión de residuos.
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